La Cirugía Maxilofacial se ocupa del tratamiento de las patologías de la boca, la cara y el cuello, así como las estructuras craneofaciales relacionadas. Esta especialidad quirúrgica tiene múltiples tipos de intervenciones de mediana complejidad que pueden realizarse de forma ambulatoria sin necesidad de ingreso hospitalario ni reserva de quirófano en el bloque quirúrgico (mentoplastias, SARPE, rinoplastias, cirugía de implantes zigomáticos, cirugía de cordales, cirugías de regeneración ósea, etc). Este circuito quirúrgico ambulatorio beneficia al paciente con una mayor agilidad en la realización de determinados tratamientos (disminución de listas de espera), un menor coste económico global de los tratamientos y una menor complejidad de la cirugía en sí.
Con la utilización de abordajes quirúrgicos mínimamente invasivos, con una adecuada infiltración con anestésicos locales y con la utilización de técnicas de sedación endovenosa se consiguen las condiciones idóneas para poder realizar determinadas cirugías de forma ambulatoria con total seguridad y confort para el paciente.