¿Qué es un implante dental?
Un implante dental es una pieza artificial, normalmente de titanio, que sustituye al anclaje del diente en el hueso. Mediante una pequeña cirugía esta pieza se atornilla en el hueso y posteriormente sobre ella se encajarán la parte visible del diente (las coronas).
Los implantes son la mejor forma de sustituir una pieza dental perdida tanto estructuralmente (para evitar la pérdida de hueso en el maxilar) como funcionalmente (para poder realizar una mordida fuerte y efectiva).
Estas cirugías suelen en muchas ocasiones realizarse bajo sedación endovenosa para un mejor confort y tranquilidad del paciente y también para garantizar un postoperatorio más confortable, con menos dolor e inflamación.
Aprovechando la vía endovenosa se administran corticoides, analgésicos y antiinflamatorios que atenúan la excesiva inflamación y también en consecuencia mejoran el dolor postoperatorio.
¿Qué puedo esperar y hacer en el postoperatorio de esta cirugía?
– En primer lugar, se trata de una cirugía ambulatoria. El paciente se traslada a su domicilio el mismo día y puede realizar una actividad parcialmente limitada.
– Se aconseja NO realizar actividad física intensa. El ejercicio incrementa la frecuencia cardíaca y la TA y eso puede favorecer el sangrado de la herida quirúrgica.
– También se aconseja NO realizar enjuagues bucales. En estas cirugías se abre la encía del paciente y también muchas veces se asocian extracciones dentales. Si realizamos enjuagues bucales podemos favorecer la eliminación de coágulos formados en los alveolos dentales e incrementar nuevamente el sangrado de las heridas.
– Otro tratamiento aconsejable es la aplicación de frio en las primeras 24 horas postoperatorias en la piel colindante a la zona intervenida. El frio provoca vasoconstricción en los capilares sanguíneos y disminuye el sangrado.
– Tener la saliva teñida con restos de sangre. En las primeras 48 horas las heridas están todavía muy frescas y en íntimo contacto con la saliva. Por ello un ligero tono rojizo en la saliva entra dentro de lo esperable. Si apareciesen grandes coágulos de sangre se debería consultar inmediatamente al centro dental o acudir a un servicio de urgencias.
– Pueden aparecer hematomas al cabo de 24-48 horas en zonas de la cara (mandíbula, cuello, pómulos, zonas peri-orbitarías). No hay que asustarse. También entra dentro de lo potencialmente posible. Los hematomas de la zona quirúrgica pueden deslizarse por las fascias musculares hacia zonas más alejadas.
– Dormir con la cabeza algo levantada (con 2 almohadas). Tener la cabeza algo elevada mejora el retorno venoso de la sangre hacia el corazón y esto disminuye la posibilidad de sangrado.
– NO FUMAR en el postoperatorio de una cirugía de implantes es algo IMPRESCINDIBLE!!! El tabaco genera calor en la boca y puede favorecer el sangrado. El tabaco tiene sustancias tóxicas que pueden favorecer infecciones en las heridas y favorecer la aparición de una periimplantitis que puede ocasionar la no integración del implante en el hueso y su posterior pérdida.
– Finalmente es aconsejable un cepillado suave de la zona intervenida con cepillos dentales blandos y enjuagues con antisépticos a partir del 2º día postoperatorio.